Aprender a caer bien a los demás se convirtió en una de las grandes obsesiones de la literatura de autoayuda y de superación personal desde que Dale Carnegie publicase el célebre Cómo ganar amigos e influir en las personas (Elipse), un clásico desde su publicación en los años 30. Un gran número de libros versan sobre el tema, y este es uno de los aspectos sobre los que suelen hacer hincapié los coach más importantes en sus charlas.
Más
allá de los sueños es un film estadounidense de 1998 dirigido por
Vincent Ward con guión de Ronald Bass basado en la novela de Richard
Matheson. Protagonizada por Robin Williams y Cuba Gooding Jr, entre
otros.
La trama está basada en la fantasía y en las
preocupaciones sobre lo que hay detrás de la muerte. Un enfoque
idílico y esperanzador sobre la vida después de la muerte cuando es
uno el que se muere, y la vida que vivimos los que nos quedamos
cuando se muere un ser querido, o varios de ellos.
Citas
"El
pensamiento es real y física la ilusión", Personaje
interpretado por Cuba Gooding Jr.
"(…) ¿Cuándo
acabará esto?
Acabará cuando quieras que acabe. Aquí no
hay reglas, Chris."
"(…)¿Por qué no puedo
verte, Doc?
Porque a mi no quieres verme, no quieres estar
muerto, pero si quieres recordar a tus hijos(…)".
"No
hay que corromperse por dentro por amar a alguien"
"A
veces cuando ganas, pierdes... y cuando pierdes, ganas"
Annie.
La característica más importante de todas, y que gracias a la gran enfermedad
contemporánea que es el déficit de atención es cada vez menos frecuente.
No hay nada que nos haga más deseables que mostrar auténtico interés en lo que
la otra persona tiene que contarnos. Algunos psicólogos han llegado a establecer
en un 30% el tiempo de conversación que debemos ocupar en una charla con otra
persona, aunque quizá simplemente con sonreír, no sacar el móvil del bolsillo cada
cinco minutoso interesarse por aquello que la otra persona está contando sea
suficiente.
"Te perdono porque eres tan maravillosa que un
hombre preferiría el infierno al cielo sólo por estar
contigo"
"(…) Lo siento, amor mío. Pero hay
cosas que tengo que decirte, y sólo me quedan unos instantes. Te
pido perdón por las cosas que no te di. No te volveré a comprar
bocadillos con salsa picante... los más grandes. No te haré
sonreír... Sólo quería envejecer a tu lado, para que pudiéramos
reírnos viendo cómo se nos arrugaba el cuerpo, juntos hasta el
final, en el lago de nuestro cuadro. Ése era nuestro cielo, ¿sabes?.
Echo de menos muchas cosas: libros, siestas, besos...
¡discusiones!... Oh Dios, las hemos tenido buenas...Gracias por eso.
Gracias por cada detalle, gracias por nuestros hijos, por la primera
vez que los vi. Gracias por ser alguien de quien siempre he estado
orgulloso. Por tu coraje, por tu dulzura... por lo guapa que has
sido, porque siempre quería acariciarte. Dios... eras mi vida. Te
pido perdón por las veces que te he fallado, en especial, por ésta.
(…) ¿Qué hacemos, amor mío? Dentro de un minuto no te conoceré,
igual que tú no me conoces ahora. Pero estaremos juntos, donde
pertenecemos. Las buenas personas acaban en el infierno porque no
saben perdonarse a si mismas. Yo no puedo, pero te perdono a ti.
La trama está basada en la fantasía y en las
preocupaciones sobre lo que hay detrás de la muerte. Un enfoque
idílico y esperanzador sobre la vida después de la muerte cuando es
uno el que se muere, y la vida que vivimos los que nos quedamos
cuando se muere un ser querido, o varios de ellos. Citas
"El
pensamiento es real y física la ilusión", Personaje
interpretado por Cuba Gooding Jr. "(…) ¿Cuándo
acabará esto? Acabará cuando quieras que acabe. Aquí no
hay reglas, Chris." "(…)¿Por qué no puedo
verte, Doc? Porque a mi no quieres verme, no quieres estar
muerto, pero si quieres recordar a tus hijos(…)". "No
hay que corromperse por dentro por amar a alguien" "A
veces cuando ganas, pierdes... y cuando pierdes, ganas"
Annie. "Te perdono porque eres tan maravillosa que un
hombre preferiría el infierno al cielo sólo por estar
contigo" "(…) Lo siento, amor mío. Pero hay
cosas que tengo que decirte, y sólo me quedan unos instantes. Te
pido perdón por las cosas que no te di. No te volveré a comprar
bocadillos con salsa picante... los más grandes. No te haré
sonreír... Sólo quería envejecer a tu lado, para que pudiéramos
reírnos viendo cómo se nos arrugaba el cuerpo, juntos hasta el
final, en el lago de nuestro cuadro. Ése era nuestro cielo, ¿sabes?.
Echo de menos muchas cosas: libros, siestas, besos...
¡discusiones!... Oh Dios, las hemos tenido buenas...Gracias por eso.
Gracias por cada detalle, gracias por nuestros hijos, por la primera
vez que los vi. Gracias por ser alguien de quien siempre he estado
orgulloso. Por tu coraje, por tu dulzura... por lo guapa que has
sido, porque siempre quería acariciarte. Dios... eras mi vida. Te
pido perdón por las veces que te he fallado, en especial, por ésta.
(…) ¿Qué hacemos, amor mío? Dentro de un minuto no te conoceré,
igual que tú no me conoces ahora. Pero estaremos juntos, donde
pertenecemos. Las buenas personas acaban en el infierno porque no
saben perdonarse a si mismas. Yo no puedo, pero te perdono a ti.
Son
esas personas que te abrazan y recomponen tus partes rotas. Con
las que has recorrido la vida. Las que te han enseñado por las
buenas. Las que te han mostrado el mundo como un lugar maravilloso en
el que vivir. Pero, sobre todo, las buenas personas son por las que
cada díacoleccionas
motivos por
los que merece la pena esforzarse y ser feliz.
No
son prepotentes ni paternales sino que, al contrario, son personas
pacientes. Porque
lapaciencia es
la virtud que enmarca la capacidad de dar libertad y margen de error
a las personas que tenemos delante.
Los más orgullosos considerarán esta ¿cualidad? como una estupidez, pero lo cierto es que una investigación realizada en la Universidad de Harvard señaló que excusarse aunque no haya motivo para ello es una de esas cosas que nos hacen caer mejor a los demás. Como señala la principal responsable del estudio, Alison Wood Brooks, las “disculpas superfluas” sirven para que “la víctima” sienta que la otra persona se ha puesto en su lugar y que tiene en cuenta sus sentimientos. Esa era la razón por la que las personas que decían “siento que el tiempo esté tan mal, ¿me dejas el móvil?” caían mejor que las que simplemente preguntaban “¿me dejas el móvil?”
El
arte de la bondad es un bien escaso, pero quizás más común de lo
que creemos. No todos somos buenos y malos en nuestra totalidad, pues
en nuestro interior damos cabida a todo. Además, esto generalmente
depende del cristal desde el que se mire.Sin
embargo, hay ocasiones en las que nos tropezamos con personas que no
están corrompidas por la sociedad y sus intereses, y que son
incapaces de hacer daño a una mosca.
Las reglas de la elegancia sugieren que debemos permanecer erguidos, con la cabeza alta y una media sonrisa en nuestro rostro si queremos parecer poderosos. Pero la clase de persona a la que realmente querrías contarle tu vida se mueve de una manera completamente diferente. Haden utiliza a Nelson Mandela para ilustrar cómo un gesto puede marcar la diferencia: inclinándose levemente hacia adelante, sonriendo y acercándose a su interlocutor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario