Los pesimistas podrán decir que la humanidad se ha hecho un lío desesperado, pero
yo tengo fe en la ingeniosidad sin límites del ser humano. La miseria humana de la cual hablamos, no solo se origina en la conducta propia del individuo y en la deformación de los diversos patrones impuestos por la sociedad, sino que también esta es alimentada e inducida muchas veces por dogmas que manipulan el pensamiento del practicante ya que generan sensaciones de supuesta paz espiritual sin importar el verdadero alrededor que te envuelva.
Así
que como conclusión puedo definir o decir que la miseria humana puede
llegar más allá de los sentimientos hasta instintivos que podemos tener y
no para en artículo incluso si se trata de familiares directos, pues la
mediocridad que se presenta y se apodera de nosotros termina siendo
fatal.
grandezas y sus miserias; grandes ciudades donde se
vive la despersonalización, la más grave soledad, que es la soledad acompañada; donde la miseria radicaliza
los sentimientos, y los anhelos de justicia llegan a convertirse en
violenta resolución de contravenirla y conculcarla; donde los instalados
pierden perspectiva, se hacen cortos de vista a medida que aumenta su
comodidad inmediata, dejándose guiar únicamente por las "leyes del mercado".
Con otras iniciativas complementarias, como
la economía solidaria y las finanzas solidarias, contribuyen a la definición de una economía al servicio del ser humano en el respeto del medioambiente. Las miserias del hombre
canta Talidio;
y yo al oírle, todas
ya las olvido.
Porque es entre ellas
el escuchar su canto
mayor miseria.
Muchas cosas racionales e irracionales suceden a diario en el seno familiar, laboral,
amistoso y sentimental de un ser humano y diversas son las
circunstancias que envuelven a estos hechos que de una forma u otra
envuelven a cada persona, pero es la actitud de cada ser lo que lleva a
tomar decisiones buenas o malas que hacen caer en la mediocridad, la
miseria y la mendicidad humana.
Pero
el punto de este artículo es conocer hasta dónde puede llegar una de
estas condiciones y es precisamente la miseria humana, aclarando de
antemano que me refiero a la miseria emocional, actitudinal, espiritual y
hasta energética de cada ser humano y no a aquella que se refiere a la
material y/o económica no dejando estas dos últimas de influir en la
antes mencionada.
Muchas
personas en este planeta interponen antes que su familia, las
condiciones materiales propias e individuales, lo que hace
inmediatamente desvirtuar hasta el sentimiento materno, llegando a caer en la vejación, humillación, maltrato, insultos, menosprecio y desconsideraciones de sus propios hijos, incluso sin importar que siendo una de estas mujer esté embarazada.
Y esto se debe nada más y nada menos que a una condición de represión y frustración emocional y económica autoimpuesta que sobrepasa cualquier límite, pues esta circunstancia es creada y no heredada y va mas allá de los sentimientos intrínsecos, intuitivos e instintivos que como parte del reino animal tenemos cada uno de nosotros. Razón por la cual los actos cometidos parecieran dementes y llegan a ser tan crueles que el alejamiento de las personas que forman parte de su entorno es inminente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario